A veces, lo único que quiero es quedarme dormida mirándote a los ojos, y perdiéndome en conversaciones sin sentido hasta quedarnos dormidas, entrelazadas eso sí, como todas las noches.
Detesto verte dormir ahí, tan hermosa, tan calma, tan calientita y cómoda.. Perfecta.
Mientras yo acá me consumo el cigarrillo de una calada, y siento esa inmovilidad decidida que es el insomnio con un ordenador en frente.
Querida, quiero cambiar la compu de habitación.
El insomnio nos conduce a lugares... Tú tienes el tuyo.
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